La agencia Reuters informó que el Gobierno de Estados Unidos enviará un ultimátum a México en los próximos días, para buscar vencer el estancamiento en una disputa sobre dar marcha atrás en la reformas enfocadas a abrir los mercados eléctrico y petrolero del país a competidores externos.
Esperan que la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos haga una oferta final a los negociadores de México para abrir sus mercados y aceptar la supervisión.
De no ser así Washington requerirá un panel independiente de solución de diferencias, en el marco del T-MEC.
Si el panel fallara en contra de México y este no tomara medidas correctivas, tanto Washintong y Ottawa podrían imponer miles de millones de dólares en aranceles de represalia a productos mexicanos.
