Después del partido de vuelta de las semifinales entre Pumas y Cruz Azul, el equipo celeste compartió un comunicado en donde dio a conocer que de las 50 pruebas realizadas a todo el equipo resultaron seis casos positivos a COVID-19, entre staff y jugadores.
Estas pruebas se realizaron de acuerdo a los protocolos de la Liga de Campeones de Concacaf. El Cruz Azul realizó la primera sesión de pruebas para la detección del COVID-19 antes de retomar su participación en el certamen donde se enfrentarán a LAFC el próximo miércoles 16 de diciembre en Orlando, Florida.
“El Club Cruz Azul se compromete con la salud e integridad de futbolistas, cuerpo técnico y todos los involucrados para la realización del torneo”, se comentó en el comunicado.
Hasta ahora, el único jugador que se sabe dio positivo fue el arquero Jesús Corona, quien no fue convocado en el partido de vuelta frente a los Pumas, sin que se dieran a conocer los motivos. Fue hasta el final del encuentro cuando el arquero compartió en sus redes sociales que tenía un dolor en la rodilla por lo que querían prevenir cualquier accidente mayor y también el resultado positivo de su prueba COVID.
El arquero también lamentó la derrota de cuatro goles a cero, con un global que los mantenía en empate, pero Pumas al ser el segundo lugar tuvo preferencia para pasar a la final.
Después del partido de semifinales, el director técnico Robert Siboldi explicó que se mantendrá al mando del equipo hasta que termine su contrato y buscará la revancha para poder llegara otra final.
La Concacaf reanudará las fase final de la Liga de Campeones del próximo 15 al 22 de diciembre en una sola sede de Estados Unidos, en Orlando. Esto después de que se suspendiera durante el mes de marzo, debido a la pandemia del coronavirus.
Fuente: Infobae
