Más del 90 por ciento de las explosiones o incendios que se generan en polvorines es por un error humano, aseguró el presidente de la Unión de Pirotécnicos de Jalisco, Miguel Zamora, luego de que en menos de una semana ocurrieran dos accidentes en talleres ubicados en los municipios de Zapopan y Ayotlán, el último dejando a una familia completa sin vida.
Indicó que en ambos casos las los polvorines estaban lejos de zonas habitacionales como lo marca la Ley federal de manejo de armas de fuego y explosivos, aún así deben de tomar otras medidas para realizar este oficio.
“Para iniciar ingresas a un taller y en todos los módulos que tenemos, tenemos un alambre sujeto a tierra física para que llegues, te tocas, para que la carga estática se libere y poner tu ropa de algodón y empezar a iniciar labores. Porque sí han sucedido casos, ya tenemos alrededor de cinco años que es evidente con pruebas fehacientes de que el uso del celular tuvo que ver con la muerte de un pirotécnico dentro de sus talleres”.
Agregó que tan solo en el caso de Ayotlán ya era el segundo accidente presentado en ese taller, y por el cual les habían suspendido la licencia de manera temporal.
Cecilia Cerna
