De manera voluntaria, pero con la consigna de que si enferman y no tienen la vacunación, no lo tomarán como riesgo de trabajo, la mayoría de empleados del Centro Médico se aplicaron hace mes tres dosis de la vacuna cubana Abdalá contra el COVID-19, informó uno de los empleados.
“Un agente sí yo no la verdad yo no, porque sí hasta los mismos jefes se la pusieron pero no nada yo no sentí nada, algunos sí les bajo la presión, otros incapacitaron taquicardia, ¿no fue forzosa? En algunos sí, llegaba el carrito se la quiere poner, no pues no se la tienen que poner porque en algún caso que se enfermen no te va a aplicar el riesgo de trabajo porque fue una negación”.
Aseguró que entre el propio personal hay dudas de la confiabilidad de la vacuna.
Alejandra Gómez
