Llegó diciembre y con él, el riesgo de morir a consecuencia de un accidente relacionado con la mezcla alcohol y volante. Así lo explica Alma Chávez, integrante de la Asociación Civil Víctimas de Violencia Vial a.c.
“Estas fechas junto con semana santa y algunos días festivos, como el grito, por ejemplo, es cuando se marcan estadísticamente los picos en siniestralidad vial y sobre todo entre tantos, secuelas graves como muertes, lesiones y discapacidades. Esto porque obviamente la gente está de fiesta, se incita a beber en posadas, en festejos”.
Tan sólo la semana pasada un ciclista perdió la vida, al ser atropellado por un conductor que viajaba bajo los efectos del alcohol.
Gerardo Sedano