𝐏𝐨𝐫 𝐒𝐚𝐦𝐚𝐧𝐭𝐡𝐚 𝐅𝐨𝐧𝐬𝐞𝐜𝐚
El saldo de la violencia en la cárcel de Machala, en la provincia ecuatoriana de El Oro, aumentó a 31 muertos luego de que autoridades localizaron este domingo por la tarde 27 cuerpos con signos de asfixia, en un suceso distinto al motín registrado durante la madrugada.
El primer estallido de violencia ocurrió alrededor de las 03:00 horas, cuando disparos, explosiones y gritos provenientes del penal alertaron a vecinos. Durante esos disturbios murieron cuatro personas y 33 reclusos, además de un policía, resultaron heridos, según el Servicio Nacional de Atención Integral (SNAI). Siete internos fueron detenidos tras la intervención de equipos élite que retomaron el control del penal.
Horas después, en otra zona del centro de reclusión, se hallaron 27 reclusos muertos por asfixia. Las autoridades investigan si se trató de ajustes entre grupos internos o de una reacción a la próxima reorganización de reclusos en la nueva cárcel de máxima seguridad que será inaugurada este mes.
Las prisiones ecuatorianas viven una crisis desde 2021, cuando estallaron enfrentamientos entre bandas vinculadas al narcotráfico. Desde entonces, más de 500 reclusos han muerto en episodios de violencia.
A pesar de que los militares asumieron el control penitenciario en 2024 por orden del presidente Daniel Noboa, este año varias cárceles, incluida la de Machala, regresaron a manos de la policía. La peor masacre carcelaria del país ocurrió en 2021, con más de 100 muertos en Guayaquil.
