José Luis Alomía, director general de Epidemiología, informó que el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos comenzó la búsqueda para identificar si algunos de los casos de infección son provocados por la nueva cepa del virus COVID-19, la cual fue detectada en el sur de Inglaterra y denominada N501Y.
El funcionario destacó que la Organización Mundial de la Salud recomendó a los países comenzar una nueva vigilancia sanitaria, esto para conocer si la nueva variante se encuentra en los territorios. Ante este contexto, Alomía aseguró que el InDre ya comenzó con el trabajo, pues ya se tiene la información necesaria y adecuada, es decir, las autoridades sanitarias ya conocen la secuencia genética y las mutaciones específicas.
Junto al subsecretario Hugo López Gatell, José Luis Alomía presentó el nuevo reporte de seguimiento de la pandemia de COVID-19 en México. Ambos funcionarios dieron a conocer el último reporte de la Secretaría de Salud, el cual indica que el país tiene un millón 325 mil 915 casos confirmados y un total de 118 mil 598 decesos.
Durante la conferencia vespertina, Alomía señaló que hasta el momento se identificaron más de 100 mutaciones del virus, las cuales fueron detectadas alrededor del mundo. En contexto, el epidemiólogo explicó que la nueva variante detectada en suelo británico se registra en la proteína Spike del virus.
“Además de las que ya se han publicado, esta fue denominada N501Y, la cual está siendo asociada a un potencial de riego, por lo que nuestra red de laboratorios comenzó a partir de ya un enfoque sobre la búsqueda”, declaró Alomía desde Palacio Nacional ante los medios de comunicación.
Siguiendo esta misma línea, José Luis Alomía dijo que una vez identificada la nueva cepa en México o cualquier otra nación, se iniciarán los protocolos adecuados para conocer si la nueva cepa está representando un problema o está incrementando el riesgo de contagio.
Fuente: Infobae